42 COSMÉTICA MASK FRIENDLY por CARTHAGE La situación actual convirtió el uso de tapabocas en un imprescindible para salir a la calle. Junto al de lavarse las manos, este hábito de protección es fundamental para evitar contagios. Aunque llevarlos siempre que se sale de casa tenga muchas consecuencias positivas, es cierto que la piel del rostro puede verse afectada por permanecer muchas horas seguidas tapada. La naturaleza oclusiva del tapaboca conlleva a que se cree un ambiente húmedo y caliente en la zona peribucal, que aumenta la producción de sudor y grasa en la piel, favoreciendo la aparición de impurezas y de sensibilizaciones. ¿CUÁLES SON LOS PROBLEMAS MÁS COMUNES? Las reacciones más comunes pueden reducirse a: 1. Lesiones por roce. Rojeces, erosión pueden aparecer debido a los daños que pueden darse en las paredes de pequeños vasos sanguíneos. Son comunes detrás de las orejas, sobre el puente de la nariz y en la zona peribucal. 2. Signos de asfixia Este tipo de alteración es debido al propio roce del tapaboca durante horas, por la oclusión de los poros como consecuencia del exceso de sudoración derivados de la sobrexposición al plástico y otros materiales. 3. Dermatitis. La piel más sensible y delicada es la que más posibilidades tiene de sufrir un brote dermatitis. Puede ser de varios tipos: • Alérgica, derivada de la pequeña barra de metal para ajustar el tapaboca puede provocar esta reacción. Suele producir una erupción enrojecida que pica. • De fricción o peribucal, aparece alrededor de la boca y puede parecer un brote de acné. 4. Sequedad. Algunos tapabocas pueden absorber la grasa natural de la piel. Sin ella, la piel se enrojece y se vuelve áspera y sensible. ¿CÓMO CUIDAR LA PIEL PARA EVITAR LAS “MARCAS POST-COVID”? La clave del éxito es el buen cuidado de la piel, una buena alimentación, las horas de sueño adecuadas y la práctica de hábitos saludables. Seguí estos pasos: 1. Limpiá el rostro tanto por la mañana como por la noche.
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